En el escenario de la investigación científica, la noción de paradigma define el qué y el cómo de la investigación. El paradigma dirige las preguntas que se realiza quien investiga. Media el sistema de ideales, es hasta cierto punto la ideología del investigador, es decir ordena la forma en que este supone deben organizarse los roles, categorías, conceptos y perspectivas sobre una problemática.

Por verlo de forma más sencilla, si su paradigma, su modelo a seguir, es, a nivel social-cotidiano, el veganismo, la forma en que organiza su vida, no solo sus comidas, sino su forma de vestir, comportarse, sus publicaciones en redes, están mediadas por esta doctrina, por este modelo, por este paradigma. 

Para el caso de la investigación científica sucede lo mismo, el investigador posee un paradigma previo o se forma en el trayecto del estudio que realiza. Es importante que cada investigación declare bajo que paradigma se encuentra porque esto justifica las afirmaciones y da contexto del sistema de ideales del investigador. De la misma forma los paradigmas diferencian a las comunidades científicas, pues estas validan, consensan, sobre la base de las teorías, métodos y prácticas que consideran legitimas.

Un paradigma es un modelo

Sobre la base de este se actúa y se proyectan caminos y soluciones. 

Un paradigma es una cosmovisión del mundo, en este caso del conocimiento, compartida por una comunidad de individuos, y modelo desde el que situarse ante la realidad para comprenderla, interpretarla y solucionar potenciales problemáticas. 

Kuhn (2004) plantea que un paradigma es un conjunto de prácticas y saberes que definen una disciplina científica en un tiempo determinado. Define a un paradigma de la siguiente manera:

…’ciencia normal’ significa investigación basada firmemente en una o más realizaciones científicas pasadas, realizaciones que alguna comunidad científica particular reconoce, durante cierto tiempo, como fundamento para su práctica posterior. […] Voy a llamar, de ahora en adelante, a las realizaciones que comparten esas dos características, ‘paradigmas’, término que se relaciona estrechamente con ‘ciencia normal’. (Kuhn, 2004, pág. 34)

El paradigma se centra en la definición de los métodos

Incluye:

  • el planteamiento de supuestos teóricos básicos sobre la realidad y el conocimiento
  • lo que se debe observar y escrutar en la investigación científica
  • los acuerdos compartidos en las comunidades científicas
  • el tipo de métodos y metodologías que es legítimo emplear como parte de la investigación
  • cómo debe conducirse un experimento y qué equipamiento e instrumental está disponible para realizarlo
  • el tipo de interrogantes que se supone hay que formular para hallar respuestas en relación al objetivo
  • cómo deben estructurarse estas interrogantes y sus respectivas respuestas
  • cómo deben interpretarse los resultados de la investigación científica
  • el conjunto de teorizaciones que pretenden explicar los fenómenos de la realidad
  • el desarrollo de libros de texto científicos, tanto elementales como avanzados

Los dos paradigmas que más se han estudiado son el positivista y el interpretativo, sin embargo, a partir de segunda mitad del siglo XX comienza a hablarse del paradigma socio-crítico. 

El paradigma positivista, ocasionalmente llamado hipotético-deductivo, cuantitativo, racionalista o empírico-analista, comienza a utilizarse en el siglo XIX. Tenía como propósito el estudio de las ciencias naturales, pero se extendió a las ciencias sociales.

Asume la existencia de una realidad, que puede ser predecible, explicada y controlada a partir de leyes, que a su vez pueden ser generalizadas teóricamente y aplicadas a múltiples realidades. Es por lo anterior que se considera un paradigma limitado, al menos en el área de las ciencias sociales, ya que el positivismo es rígido en la determinación y puesta en práctica de soluciones, por lo que no reconoce eventualidades, ni cuestiones relacionadas a la subjetividad humana. 

El paradigma positivista parte de que el conocimiento previo potencia siempre nuevas hipótesis y que estas, en su comprobación o refutación, conducen a nuevo conocimiento. Establece, de esta forma una correlación en la que se supone que quien investiga no aporta nada propio, nada de su subjetividad, al proceso investigativo. Para este paradigma un resultado investigativo es válido en cuanto es comprobado cuantitativamente, a partir de muestras representativas, con criterios universales estimados previamente. 

Paradigma postivista

Entre las características de una postura o paradigma positivista se encuentra el monismo metodológico, que implica que aun en la diversidad de objetos-sujetos abordados en un proceso de investigación, debe existir unidad de método y homogeneidad de doctrina, una sola forma de considerar el fenómeno. Si existen varias formas de ver el mismo fenómeno, para el positivismo, no se está hablando de conocimiento científico. Otra característica es la presunción de un canon, que parte de las ciencias exactas: la ciencia físico-matemática, que da la medida del desarrollo del resto de las ciencias. 

Paradigma interpretativo

Por otro lado, el paradigma interpretativo, fuente de la metodología cualitativa, expresa que en las ciencias sociales la comprensión de los fenómenos debe darse desde una visión de las cualidades. Se centra en la apreciación de las causas y consecuencias de un fenómeno, pero hace énfasis en el proceso, en el por qué y el cómo del mismo. De esta forma acude a la descripción de lo distintivo, reconociendo la existencia de realidades plurales.  No pretende encontrar regularidades, generalizar, establecer leyes universales ni parte de datos estadísticos. 

La metodología cualitativa, que parte del paradigma interpretativo, tiene como objeto el sujeto y el significado de sus acciones en contextos determinados. Esto no niega la posibilidad de establecer teorías o de generalizar, solo que no de forma causal. Es decir, no supone que un hecho conduce a otro necesariamente, sino que aborda los posibles matices y deja abierta la posibilidad de múltiples interpretaciones de lo mismo. Trata de entender el significado del accionar humano, la connotación sociocultural de las acciones y del contexto, tendiendo a suponer que el pensamiento y acción humana se encuentran dirigidas por las significaciones subjetivas, que no so observables ni cuantificables. 

Paradigma sociocrítico

El paradigma socio-critico se encuentra frente al reduccionismo del positivismo y al subjetivismo del interpretativo. Introduce el valor de la ideología en la interpretación de los resultados, dando cuenta de la falsa neutralidad de la ciencia. Parte de concebir que los seres humanos participan de la realidad a través de la experiencia en un proceso que no es solo de testigos de la realidad sino además creadores. Se enfoca en un análisis cualitativo de la realidad. 

A partir de los paradigmas se revela el uso de una perspectiva metodológica u otra. El escoger determinada metodología compromete al investigador, no solo en su visión del proceso, en la elección de un paradigma, sino en la forma en que este se concreta en métodos específicos. En consecuencia, con esto se puede poseer un paradigma positivista y utilizar métodos cualitativos, solo que el uso de estos estará limitado por la visión positivista, de la misma forma con el paradigma interpretativo, con enfoque metodológico cualitativo y el uso de métodos cuantitativos.

Conclusiones 

Los paradigmas metodológicos son incompatibles entre sí desde el punto de vista de la base ideológica que poseen, sin embargo, en su práctica, cuando se concretan en perspectivas metodológicas específicas, son flexibles y abiertos. Es lo que permite que se puedan utilizar métodos de diverso carácter e interpretaciones plurales de los mismos escenarios de investigación. 

Kuhn; T, S. . (2004). La estructura de las revoluciones científicas. México: FCE.

Autor

  • Dra. Jeisil Aguilar Santos

    👩🏽‍🏫Doctora en Ciencias Filosóficas. Diplomada en Pedagogía, Graduada de la Carrera Licenciatura en Estudios Socioculturales en la Facultad Ciencias Sociales de la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas, en el año 2007.

    ✍🏽Docente de Doctorado en Educación, Universidad de la Empresa, Montevideo, Uruguay. 💁🏾‍♀️Coordinadora académica de la Maestría en Gestión de la Comunicación Digital ❤️ y el Diploma en Metodología de la investigación❤️. Tutora metodológica en la Maestría Educación, Sociedad y Política Maestría en Educación, Innovación y Tecnología, FLACSO Uruguay.

    Consultora en The Learning Bar, NB, Canada

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